¿Necesito un videowall en mi sala de control?

Suele ser el icono y el punto de referencia de cualquier sala de control: el videowall es lo primero que se nos viene a la cabeza cuando entramos en este espacio porque concentra mucha atención.
Sin embargo, ¿es un elemento esencial e inseparable de la noción de sala de control y supervisión? Por ejemplo, hace poco nos pidieron que asistiéramos a una empresa de energía en la definición de su nueva sala de control: durante el proyecto, algunos miembros del equipo no dudaron en exigir la supresión del videowall; el debate fue animado entre los usuarios y puede generalizarse a muchas otras industrias, administraciones o empresas de servicios.

A continuación trataremos de informar sobre los argumentos de ambas partes: ¿a favor o en contra del videowall?

Sala de control con videowall

# Contras

• La multiplicidad de fuentes: es obvio que las salas de control y supervisión integran cada vez más información y, en consecuencia, la elección de las fuentes que se muestran en el videowall es cada vez más compleja. Esto es más fácil de gestionar en las estaciones de trabajo individuales.
• La rotación cada vez más rápida de la información: no sólo tenemos que tratar más información, sino que la velocidad de procesamiento está destinada a aumentar por numerosas razones: cadenas de suministro cada vez más ajustadas, demanda de tiempo real por parte de los usuarios de los servicios, etc.
• Necesidades evolutivas: (modelos de negocio, nuevos modos de organización, procesos asociados, etc.) no encajan bien con equipos que requieren ajustes a priori como el videowall.
• Individualización: si hay varios operadores en una sala de control, es para procesar información diferente; en estas condiciones, ¿de qué sirve tener información común en un foco central?
• Coste: para un número equivalente de pantallas, un videowall cuesta más que los puestos de trabajo individuales (con una gama muy amplia, es cierto, ya que el coste adicional puede ser muy alto o bajo en función de la configuración técnica)

# Pros

• Un modo mucho más colaborativo: la información compartida visualmente permite de forma natural una mayor colaboración entre los operadores de la sala. Además, el videowall también permite la integración de muchos más no operarios en el proceso de toma de decisiones (especialistas, directivos, etc.).
• Una visión global: es la yuxtaposición de las diferentes fuentes lo que permite tomar conciencia de la situación. La alternativa al videowall serían consolas de operador con numerosas pantallas que fragmentan la información.
• Las nuevas soluciones de videowall se han vuelto muy flexibles: Esto responde a las tres primeras objeciones de los CON:
  • Los escenarios de visualización son cada vez más potentes. No sólo se pueden programar con un clic, sino que también se pueden activar por eventos (alarmas, reconocimiento visual, ….)
  • Los principios de construcción de los muros son ahora modulares; sea cual sea la tecnología (IP, servidor de vídeo), es posible redimensionar el muro pero también crear/eliminar otros nuevos.
• Cada vez más, los videowalls integran tecnologías de tipo CAD o VMS que preprocesan la información y eliminan así la necesidad de intervención del operador.

Al final, para tomar una decisión, tenemos que volver a la esencia misma de la sala de control y supervisión. En pocas palabras, la sala de control es una herramienta que permite reunir en un mismo lugar competencias que comparten la misma información para tomar decisiones en tiempo real.

Tras las simulaciones de las diferentes hipótesis, se puso de manifiesto que si el videowall no aceleraba la toma en consideración de la información crítica (las alarmas, los flujos RSS, etc. pueden activarse en medios individuales: PC, smartphone, etc.), en cambio permitía :

• una agregación mucho más rápida de la decisión colectiva
• un medio de dirección por parte de los gestores centrándose en un contenido seleccionado

En conclusión, en MOTILDE creemos que no hay que tener una visión demasiado monolítica del videowall : Las tecnologías y los modos de visualización son efectivamente muy numerosos y permiten una gran flexibilidad de respuesta para cada proyecto. ¿Qué tienen en común dos pantallas grandes controladas por un simple KVM con una pared de 5×10 pantallas controladas por un servidor de vídeo/IP?